- Claude Monet -
Testamento enterrado
a la sombra del rosedal:
Le dejo mi guitarra
al vendedor de la panadería.
La hierba bendita
a la vieja del balcón.
La caldera
que silba Villa Lobos
al Fray Gustavo
que cose almas
los miércoles por la mañana.
El libro de poesía
de Augusto dos Anjos,
al cobrador del Expreso 022.
Firmado:
La niña de los ojos tristes.
Chico Buarque me llamaba de Carolina,
Pero era sólo un disfraz.
Soy yo la niña
que vio el tiempo pasar en la ventana,
sin ver.
Bárbara Lia